Con espíritu aventurero nos dirigimos el pasado jueves a KORTEZUBI, nos adentramos en la CUEVA DE SANTIMAMIÑE, admiramos sus pinturas rupestres y vimos su famoso "huevo frito".
Tras la visita tomamos un tentempié para recobrar fuerzas, los más peques, (Andrea, Joane, Alba, Arrate, Sergio, Claudia, Nuria, Naroa y Sergio) se quedaron jugando en el parque junto a la cueva, mientras que los mayores, (Adrian, Beñat, Irene, Miguel, María, Ariadna, Endika, Itxiar y Zhi-Lei) fueron de exploración al BOSQUE PINTADO DE OMA, después de caminar unos 3 Km, nos quedamos impresionados al ver todos los árboles pintados, sin duda es una obra muy original.
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